El Camino de Santiago es uno de los lugares de peregrinación y de culto más importantes que hay en todo el mundo. El mausoleo dedicado al apóstol atrae a miles de fieles y peregrinos en busca de la bendición del santo cada año. A continuación, te explicamos todo lo que debes saber sobre los orígenes del Camino de Santiago, así como la historia del apóstol y su situación actual. ¡Sigue leyendo para informarte!
Historia Camino Santiago: el apóstol
La historia del Camino de Santiago nace en la Edad Media, concretamente en el siglo IX cuando un pastor llamado Pelayo encontró el cuerpo del apóstol Santiago. Ahora bien ¿Cómo acabó el cuerpo del apóstol Santiago en Galicia? Para responder a ello debemos remontarnos a la época de Jesucristo. Santiago era uno de los discípulos de Jesús y una de las personas que lo acompañó en los momentos más importantes de su vida. Según la biblia era natural de Galilea, hijo de Zebedeo y Salomé y era conocido como “el hijo del trueno”. Tras la muerte del mesías, Santiago —como el resto de los discípulos— se dedicó a proclamar su palabra a través del evangelio llegando hasta Hispania. Según la tradición, se cuenta que se estableció en Gallaecia (actualmente Galicia), pero después marchó hasta Palestina para continuar con su labor. Sin embargo, en el año 44 d.C. fue asesinado por orden del rey Herodes Agripa I convirtiéndose en el primer apóstol en morir por la fe cristiana.
Tras su fallecimiento, tuvo lugar el traslatio, momento en el cual el apóstol fue trasladado hasta Galicia para parte de sus discípulos Teodoro y Atanasio —quienes desobedecieron las órdenes del Herodes Agripa I— para darle sepultura. Los tres viajaron en una barca sin timón ni vela hasta llegar a la costa norte de Galicia y remontaron por el río Ulla —esto es lo que se conoce como el traslatio que cada 31 de diciembre se recrea en la Catedral de Santiago—. El cuerpo del apóstol llegó hasta Iria Flavia, una región controlada por la reina pagana Lupa que sometió a los discípulos a duras pruebas para que pudieran enterrar el cuerpo del apóstol. La más popular fue la de concederles unos bueyes salvajes con el fin de transportar el cuerpo del santo. Tal como cuenta la leyenda, tras las oraciones de los fieles los animales se volvieron dóciles, permitiéndoles cargar con el difunto. De hecho, según los escritos fueron los propios animales quienes decidieron el lugar donde se enterraría al santo.
Concretamente, cerca de una fuente en la que se pararon a beber agua y que hoy en día se conoce como Rúa do Franco de Santiago, a unos 100 metros de la catedral y de la Plaza del Obradoiro. Se dice que la reina se convirtió ante el cristianismo después de presenciar el milagro y mandó construir el sepulcro del apóstol, conocido como Arca Marmárica —y que tras la muerte de sus discípulos cayó en el olvido—.
Camino de Santiago: orígenes
La historia del Camino de Santiago surge en el siglo IX cuando el pastor Pelayo descubre el cuerpo del apóstol, concretamente en el año 823. Dicen los escritos que el descubrimiento fue un milagro guiado por unos destellos en el cielo y las estrellas, que señalaban el lugar concreto. Al observar el fenómeno en repetidas ocasiones durante las noches, el ermitaño salió de su cueva y decidió contar lo que ocurría al obispo de Iria Flavia, Teodomiro. Tras comprobarlo una noche optaron por visitar el lugar y descubrieron un sarcófago oculto con el cuerpo de Santiago y el de sus dos discípulos, Teodoro y Atanasio. Ante la importancia de tal hallazgo Teodomiro no dudó en desplazarse hasta Oviedo, capital del reino, para informar al rey Alfonso II, el Casto. Es en este momento cuando podemos responder a cuándo empezó el Camino de Santiago ya que fue el monarca Alfonso II quien, consciente de la importancia del hallazgo, se convirtió en el primer peregrino de la historia iniciando su recorrido desde Oviedo hasta la tumba del apóstol en lo que se conoce como la primera ruta jacobea —o lo que hoy describimos como Camino Primitivo—. Además, fue el rey quien mandó construir el templo para albergar los restos del apóstol y que fuera digno de visitar por otros monarcas cristianos. Este primer templo conforma los orígenes de la Catedral de Santiago (ya que más tarde fue ampliándose hasta convertirse en ella) y el nombre de la ciudad Campus Stellae o Santiago de Compostela.
Otras variantes de los orígenes del Camino de Santiago
Ahora que ya conoces cuándo se creó el Camino de Santiago es importante saber que también existen otras versiones, de hecho, se habla de una variante más antigua todavía. Se dice que los diferentes caminos han estado atrayendo a peregrinos desde antes del siglo VIII a lo largo de la ruta Galaxia hasta Fisterra. El motivo se debe a que se creía que en la ciudad de Fisterra o “el fin de la tierra” se acababa el mundo y muchos querían comprobarlo con sus propios ojos.
El Camino de Santiago en la actualidad
El Camino de Santiago es en la actualidad el lugar con mayor peregrinación de toda Europa, junto con Roma, además de ser el más antiguo de todos los caminos. Este concentra cada año a 200 mil peregrinos que optan por acudir a la catedral a través de los principales caminos, como es el Camino Francés, el Camino Primitivo o el Camino del Norte, considerados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, de las visitas que se reciben por las otras rutas del camino, como es el caso del Camino Portugués, el Camino Inglés, el Camino de Fisterra Muxía, el Camino del Sudeste – Vía de la Plata, el Camino del Mar de Arousa y Río Ulla o el Camino de Invierno, que se fueron fijando a lo largo de la historia.
Lo cierto es que no todos los peregrinos que viajan a Santiago en la actualidad por sus diferentes rutas y tramos lo hacen por cuestiones de fe, como existía en los orígenes del Camino de Santiago. De hecho, son muchos los que prefieren hacer el peregrinaje para disfrutar de los bonitos paisajes de cada tramo y compartir tiempo con sus amigos o familiares, para superarse o por otros motivos personales.